viernes, 31 de marzo de 2017

Miguel Hernandez, el Poeta del Pueblo


En el 75º Aniversario de la muerte de Miguel Hernández, la Biblioteca Infanta Elena, le ha rendido un pequeño homenaje, en realidad, poemas sueltos a modo de exposición, con el titilo de Miguel Hernández. La presencia ausencia
Ayer precisamente, lei en algun sitio una frase sobre la muerte de este poeta que me llamo la atencion. A Miguel Hernández, que murió sin saber que existía. 
Miguel Hernández fue un poeta odiado por el régimen franquista, tanto por ser republicano durante la guerra civil que asolo España en cualquiera de sus bandos, como por atacar a sus enemigos. Pero amaba profundamente a España. Tampoco me parece justo que haya quienes quieren reviltalizar su figura tan solo basándose en la politica. Antes y despues de republicano era poeta, el poeta del pueblo, como le gustaba ser llamado

Esbozo biografico

Miguel Hernández nació en Orihuela (Alicante) en 1910. De origen humilde, tiene pronto que ponerse a trabajar, abandonando los estudios, aun asi desarrolla su capacidad para la poesia gracias a ser un gran lector de la poesia clasica española. Forma parte de una tertulia en Orihuela y conoce a Ramon Sije, con quien trabara una gran amistad, dedidandole una muy sentida amistad
Dibujo del poeta realizado por
Antonio Buero Vallejo
Despues de publicar en periodiocos de su ciudad alicantina, viaja a Madrid y colabora en distintas publicaciones, estableciendo relacion con los poetas de la epoca.
De regreso a su ciudad, publica Perito en Lunas, donde se refleja la infuencia de los poetas que leyo en su infancia y de los que conocio en Madrid
Ya establecido en Madrid, trabaja como redactor en el Diccionario Taurino de Alfonso Cossio y en las Misiones Pedagógicas de Alejandro Casona, ademas de otras importantes revistas literarias. En 1936 aparece El Rayo que no cesa. Anteriormente había publicado El silbo vulnerado e Imagen de tu huella
Tomó parte muy activa durante la guerra civil, durante la cual compuso Viento de guerra y El hombre acecha, con un estilo que se conoció como poesía de guerra
Al acabar la guerra civil, fue detenido en la frontera con Portugal y condenado a 30 años de cárcel. Pero no llego a cumplirla al morir de tuberculosis en 1942 en la cárcel. Durante su cautiverio escribió Cancionero y romancero de ausencias


miércoles, 8 de marzo de 2017

Poetisas en la Generacion del 27



Con motivo del Día Internacional de la Mujer, la Biblioteca Publica Provincial Infanta Elena de Sevilla,  ha organizado un cálido homenaje a todas las intelectuales de la Generación del 27 que quedaron olvidadas y silenciadas, incluso para sus compañeros de generación


El problema de las mujeres siempre ha sido un problema de hombre (Simone de Beauvoir)

Maruja Mallo, Marga Gil-Roësset, María Zambrano, María Teresa León, Josefina de la Torre, Rosa Chacel, Ernestina de Champourcin, Concha Méndez son algunas de las reprentantes de una generacion que sufrio, como la de los hombres el exilio y la guerra civil pero incluso quedaron en la sombra la mayor parte de ellas

Algunas de estas mujeres olvidadas tuvieron un peso enorme en la profusion de las vanguardias artisticas y tambien en la politica  en la España del siglo XX. Al igual que los hombres de esa Generacion, sufrieron la Guerra Civil y el exilio, pero ellas, ademas, discriminacion, la de genero


sábado, 4 de marzo de 2017

¿Silencio en la biblioteca?

Apuntes


La biblioteca es un espacio de estudio y de consulta, en el que debemos guardar silencio o hablar en voz baja para no molestar el trabajo de los demá

s. Asimismo, sus libros e instalaciones son utiles para todos, y por ende debemos cuidarlo y conservarlo
Si esto es asi ¿por que la gente no guarda silencio en las bibliotecas? Yo voy desde hace años a la Biblioteca Infanta Elena tan solo para leer no a estudiar y se que perfectamente podría leer en mi casa, que no hay nadie que me moleste, pero ya me he acostumbrado a ir y en realidad es una de mis mayores satisfacciones del día. Quiero decir, con todo esto, que soy un usuario constante y he observado muchas cosas en la biblioteca, tanto por parte de los otros usuarios, como de los que deberían guardar silencio por trabajar en un lugar como ese, me refiero a los empleados de la Biblioteca. Igual se me acusa de neurótico, pero es que los demás tampoco están haciendo las cosas bien
Hay gente que piensa que esas normas no van con ella, que es mejor ignorarlas. A veces entran dos personas en la sala de lectura y lo primero que hacen es unir los sillones y tan solo con el móvil, ya sea para chatear o para consultar cualquier cosa en Internet, se  sientan y comentan lo que vayan viendo. Igual ocurre  con revistas o periódicos en mano, que comentan lo que vayan leyendo. Si cogen un libro no es mas que nada para disimular, por tener algo entre las manos. Lo que hagan no les importa a nadie, pero si que hablen en un tono bajo, de acuerdo, pero perfectamente audible para quienes están cerca. Ya el hecho de que unan los sillones, están indicando que van dispuesto a hablar. ¿Y para eso necesitan una biblioteca? ¿No estarían mas cómodos en la calle, en un parque? Si leen los mensajes de la biblioteca, verán como se pide que se guarde silencio y que, por tanto, habrá que hablar lo menos posible, modulando la voz, cosa que a veces no resulta fácil

Con relación al móvil  tampoco es del todo normal, En ciertas ocasiones alguien ha hablado por teléfono desde el sillón, en voz baja, pero perfectamente audible. Otros creyéndose que entre los pasillos de libros es mejor, no se dan cuentan que es peor, porque encima la voz rebota entre los libros y al final se esta escuchando hablar. Por tanto, lo mejor seria salir al vestíbulo o irse a los servicios en ultimo caso. Por otro lado, hay quienes van, a la biblioteca tan solo a aprovechar la red wi-fi y a algunos se les olvida que hay que guardar silencio y aunque estén callado, porque no tienen a nadie a su lado, se les ha olvidado quitar el sonido de las notificaciones y los demás tenemos que oir las teclas, las notificaciones de los mensajes instantáneos

No hablemos de los que casualmente se encuentran en la biblioteca, que su saludo inicial es tal que parecen que en lugar de la biblioteca se han encontrado en la calle. Y no contentos con eso, no son capaces de modular la voz
Pero ya no es la conciencia individual de los usuarios, es que a veces los empleados, tambien hablan mas alto de lo normal, a veces forman corrillos, etc...
¿Cual seria el comportamiento de todas estas personas si fuesen no ya lectores sino estudiantes que quieren concentración porque no la encuentran en otra parte y acuden a la Biblioteca como ultima esperanza de encontrar un sitio tranquilo?