Por qué leer un libro

¿Por qué leer un libro? No es fácil responder a esta pregunta por que no todos compartirían la misma opinión debido a la diversidad de libros esperando a sus lectores que hay. Habrá quien piensa que la  lectura es aburrida y no creerán conveniente leerla (¡no saben lo que se pierden!), Otros pensaran que los libros simplemente entretienen, les evaden de la realidad, les hace entrar en mundos fascinantes y eso, por si solo, es ya uno de los principales objetivos de la lectura y finalmente otros los tomaran como forma de saber, de instruirse. No hay que olvidar que las bibliotecas contienen, en su mayor parte, todo el saber del hombre, creo que se puede decir  que las bibliotecas son la memoria colectiva de la Humanidad. Cualquier biblioteca, por pequeña que sea, conserva la sabiduría del hombre a lo largo de su historia

         La lectura es conveniente para cualquier persona: por un lado nos entretiene, algo que por si solo es algo importante, y por otro no forma culturalmente. Decidir que libro empezar a leer no es fácil, debido a la variedad de libros, géneros y autores. Decía Miguel de Cervantes que no hay libro malo del cual pueda sacarse algo bueno. Es cierto, hay una gran diversidad de libros, que podrán estar mejor o peor escritos, pero nosotros los lectores no deberíamos juzgar tan a la ligera a los autores por nuestra forma de ver o sentir la lectura. Podemos estar de acuerdo en la forma de escribir, pero si nos paramos a pensar lo difícil que es escribir, resumir de forma concreta, en pocas paginas lo que sabemos sobre un tema, exponiéndolo de forma fácil y concisa, exponiéndolo tal y como nos pasa por la mente dándole cierto orden a nuestros pensamientos, dejando a un lado todos nuestros tabúes, todas aquellas cosas que nos preocupan y que por nuestros prejuicios inconscientes, que luego no sabemos transmitir sobre el papel, no haríamos una critica, a veces feroz, sobre el libro en cuestión.

         Por otro lado, leer nos abre nuevos horizontes, algo de lo que leamos nos puede hacer pensar en nuestra  forma de pensar en nuestra forma de ver la vida para actuar después en consecuencia, aplicando las aventuras y la mentalidad de los personajes a nuestra propia existencia, resolviendo los problemas que nos plantean la vida e instruyéndonos a la hora de exponer diversos temas ante los demás, haciéndonos mas claros y conciso, no solamente ante nuestros interlocutores sino ante nosotros mismos, y eso es por si mismo, algo importante, independiente de lo que piensen los demás.

         Entrar en el mundo de los libros es una aventura fantástica y excitante. Hay quienes caen en el error de creerse que por haber visto una película basada en el libro sobre el que se ha hecho esa película ya no necesitan leer ese libro. Creo que es un error porque en numerosas ocasiones una película, un guión,  difiere mucho de la novela y a veces ni los mismos escritores están de acuerdo con la versión de su libro. Ver una película no es leer un libro, quizás sea mejor conocer un libro a través de un guión cinematográfico, de la película en si misma... Esto puede ser el comienzo para aficionarse a la lectura, pero también depende de los gustos y exigencias del lector

         Los libros no tienen edad, se escriben en un contexto y un propósito determinado, pero en otra época puede tener otra interpretación e incluirlo en la literatura fantástica o infantil, según sea el caso. Porque ya no le dan las connotaciones sobre las cuales se escribió esa novela, ese cuento o relato. Juan Ramón Jiménez dijo que no escribiría nunca para niños o adultos expresamente, escribirá para todo aquel que quisiera leerlo. Paradójicamente, hay libros que se escribieron expresamente para adultos que hacían una critica, a veces feroz y en su momento incomprendida por sus contemporáneos, sobre la sociedad que le toco vivir a su autor. Al no advertir, o no querer advertir esa critica de la sociedad, se la tomo como un cuento infantil, como algo que no tenía que ver con ellos... Pero lo peor de todo es que aun se los siguen considerando como “clásicos infantiles”, un termino que a mi juicio me parece incorrecto, debido a elementos demasiados fantásticos que se desprende de ellos, porque nos negamos a ver la realidad del hombre, la dualidad del hombre, el bien y el mal que cada hombre encierra dentro de su ser y sobre cuyas ideas escribe metáforas sobre la sociedad en la que vive, buscando un mundo mejor, mas justo... Los cuentos que consideramos infantiles, como Caperucita Roja, El Gato Con Botas, etc... encierran un drama terrible del hombre, de su condición,  que muchos se niegan a ver, son más dramáticos de los que las versiones infantiles no han hecho llegar a través de sus traducciones y edulcoraciones.

Me gustaría centrarme en Viajes de Gulliver, de Jonathan Swift (sigloXVIII) y Alicia en el País de las Maravillas, de Lewis Carroll (siglo XIX) que son clásicos de la literatura en general, sin calificativos. Viajes de Gulliver apareció bajo el nombre de un tal Samuel Gulliver en la cual describió todas sus aventuras, entre la cuales, a través de diferentes naufragios y de otras calamidades causadas por la mano del hombre, llegaba a diferentes países que no se encuentran en ningún mapa, que son desconocidos inclusos por las más avanzadas tecnologías de la actualidad. Pero él las hizo ver como verdaderos países, con el fin de imaginar todo los caracteres del hombre, toda su crueldad y benevolencia, su orgullo y su contemplación sobre todo lo referente a la Humanidad, lo ridículos de muchas leyes y costumbres de la sociedad, al menos de la época en que se escribió pero que en muchos aspectos no nos diferenciamos en estos años actuales, quizás porque el hombre siempre será el mismo, con toda su bondad y su crueldad, con todo su orgullo y su egocentrismo, con esa dualidad que caracteriza al ser humano...

Bueno, en Liliput o el País de los Seres Diminutos, aparece como un gigante en el que ve a unos seres a quienes refleja la sociedad inglesa que le toco vivir, no por su tamaño, que es lo más evidente, sino por su forma de pensar, en su forma de actuar, en su colonialismo... De esta forma, ridiculiza a esta sociedad a la que pese a todo el autor pertenece. En otro viaje, llega a Brobdingan o el País de los Gigantes, en los que satiriza a aquellos personajes que con una mentalidad destructiva, pero con una fuerza física enorme, el se ve como un ser diminuto, como a quienes en su anterior viaje ridiculizaba. En el viaje a Laputa encuentra a personas con ideas muy extravagantes sobre Filosofía, Ciencia, Política, etc. En el viaje en el cual llega a Houyhnhnms o el País de los Caballos hace una sátira sobre la naturaleza humana en general, sobre lo que el mismo piensa y ha observado en el ser humano a través de su comportamiento. En este ultimo viaje ve como los caballos hablan y le hace a su vez una critica feroz sobre su comportamiento, incluso sobre esto que a nosotros nos parece tan normal como montar a caballo o utilizar a los mismos como animales de tracción, en donde se emplea su fuerza...  En su conjunto no es una novela amable, que se lea con facilidad,  porque nos hace pensar mucho en nosotros mismos, en nuestra forma de ser; es amarga y triste a la vez aunque haya momentos que nos haga reír y sorprendernos con su exorbitante fantasía. Durante mucho tiempo, esta novela se incluyo en las novelas infantiles, déjanos solo ver los dos primeros viajes: los Diminutos y los Gigantes, dejando a un lado los demás viaje viajes al considerarlos demasiados agresivos para las mentes infantiles...

Por otro lado, Alicia en el País de las Maravillas y sus  continuaciones, fue escrita por un matemático llamado Lewis Carrol, con cuya novela pretendió establecer una parábola entre el razonamiento natural del Hombre y el razonamiento racional-matemático, al tiempo que una vez mas, critica a la sociedad puritana inglesa  y a la naturaleza humana en general...

Creo que me he extendido demasiado con estas dos novelas, quizás tendrías que pedir perdón por ser tan reticente y quizás demasiado presuntuoso. Quería hablar de dos novelas clásicas, dentro de la Literatura, en las que teniendo una fuerte critica social, se quedan en la mentalidad de muchos lectores como libros “recomendados para niños” por su desbordante fantasía. Muchos editores caen en un grave error, resumiendo y adaptadanla al mundo infantil, destruyendo toda la critica con la que el autor la creo y centrándolo todo en la fantasía,  al creer que así son más asequibles para el lector joven, a quien solo le interesa la fantasía para crear nuevos horizontes, haciendo del mundo una versión menos comprometedora pero agresiva si  no la ven con los ojos de la realidad

Para concluir toda esta exposición, esperando no haber sido demasiado pesado y presuntuoso, quisiera decir que leer es una aventura apasionante y un vicio que no debería perderse, el único por el cual el hombre debería